‘Granma’ la emprende contra los medios que reportaron un feminicidio en La Habana

Un grupo de activistas contra la violencia de género denunció el asesinato de otra mujer presuntamente a manos de su pareja en Cuba y reclamó una «ley integral contra la violencia de género en el país», una denuncia que ha provocado una dura respuesta del diario oficial Granma. 

El órgano oficial del Partido Comunista reaccionó con un artículo publicado este miércoles en el que ataca a los activistas y los acusa de servir a una «maquinaria anticubana» que busca la «importación forzada de iniciativas surgidas en otros países al estilo de las campañas extranjeras «Me Too» y «Yo sí te creo», para utilizarlas de manera tóxica». 

«Esa maquinaria mediática busca llevarlos hacia un feminismo snobista, fanatizado, superficial, asumido como un estilo de vida, y para algunos oportunistas, fuente de beneficios; así como persigue enajenarlos de todos los objetivos y capacidades prácticas de lo que sería verdaderamente transformador y revolucionario», asegura el texto.

El caso que provocó la furia de Granma fue el asesinato a machetazos de Mailín Diéguez, quien tenía 30 años y deja dos hijos. La víctima era natural de Santiago de Cuba pero los hechos ocurrieron en el municipio de Marianao, a las afueras de La Habana. 

La Red Femenina de Cuba (RFC) dijo a finales de junio que desde enero pudo identificar ocho feminicidios. Por su parte la plataforma independiente #YoSíTeCreoenCuba a través de sus redes sociales continúa exhortando al Parlamento a legislar sobre la violencia contra la mujer. 

Las últimas cifras reportadas por Cuba sobre feminicidios son de 2016. En ese momento la tasa de feminicidio fue de 0,99 por cada 100.000 adolescentes y mujeres a partir de los 15 años. La prensa oficial tiene prohibido por las autoridades cubrir casos de asesinatos o feminicidios a no ser voluntad expresa del Partido Comunista. 

Mariela Castro, hija del gobernante Raúl Castro, dijo en 2015 que en Cuba no existían los feminicidios porque era «un país seguro». También ha arremetido contra quienes intentan denunciar este tipo de crímenes en redes sociales, sugiriendo que reciben pagos desde Estados Unidos. 

El artículo de Granma ha provocado una ola de indignación. La activista Sandra AbdAllah-Alvarez Ramírez lamentó en redes la inacción de las autoridades. «Por cada cubana que muere, que es violentada, acosada, violada, hay decenas más sufriendo por el solo hecho de ser mujeres», escribió.

«Lo peor de todo es que han utilizado la portada de Granma para atacar a quienes están visibilizando un problema que se considera en muchos países otra emergencia de salud pública», lamentó en Twitter Salomé García, una artista y diseñadora cubana.

«Ni siquiera han compartido los recursos que tiene una mujer en Cuba si sufre violencia», agregó. 

La periodista Elaine Díaz, directora de Periodismo de Barrio lamentó que «la lógica de Granma prefiere culpar a los medios que visibilizan los feminicidios que a los agresores». «Por culpa de lógicas como esas siguen muriendo mujeres», aseguró en Twitter. 

Para otro usuario en Twitter identificado como Mag Jorge Castro, «no es el feminismo lo que les molesta, es que no sea su feminismo». «Están en contra de cualquier espontaneidad de la sociedad civil que escape a su disciplina partidista, poco interesa lo justas que sean las causas o el horror detrás de cada estadística», opinó.

Para Lisvani Peña, un cubano que reside en Miami, el Gobierno tiene que «dejar de meter la basura debajo del escaparate». «A ver si nos vamos acostumbrando, porque para su desgracia, así funciona el siglo XXI», dijo en referencia a las décadas en que el gobierno cubano tenía el monopolio sobre la información. 

«Ya ‘la verdad’ no es monopolio de Granma, a ver si acaban de enterarse y resuelven el problema en vez de pasarse la vida atacando al mensajero», aseguró.