En su poesía, Alice Walker muestra la fuerza, la sensibilidad y el carácter activo de las mujeres negras en la cultura y la historia de su país.
En su poema “El acosador”, López Amaya ahonda en una experiencia atroz compartida por muchas mujeres, y en su profunda huella psicológica.
Rosario Ferré integra con maestría los logros de la tradición literaria con una mirada crítica a los retos que enfrenta la mujer en la actualidad.
La poesía de Dorothy Parker deja ver esa rara mezcla de ligereza y profundidad con que se imponía como una mujer libre y segura de sí.
En la poesía de Sophia de Mello la brevedad se vuelve hondura y las circunstancias vitales de las que nace el poema adquieren una dimensión universal.
Tania Díaz Castro rompió con las normas de la literatura femenina de su tiempo para abrazar un discurso filoso y libre, desafiante, feminista.
La obra de Teresa Wilms Montt, breve pero intensa, es un hito en la poesía escrita por mujeres y un referente obligado del feminismo en Hispanoamérica.
Con su poesía, Gina Pellón pinta escenas recobradas del pasado, desnuda en ellas el engaño, y da fe de un espíritu que se resiste al silencio.
Carmen González Chacón mira al presente desde la experiencia de sus ancestros: la esclavitud, la discriminación, pero también la capacidad de sobreponerse a los golpes dan fuerza a su poesía.
"Estuve y ciertamente no estuve, pero sí bajé las escaleras, y ella estrechó la garra adolescente que fechó aquel poema mío..."