Denuncian al director del hospital Hijas de Galicia por divulgar información de una embarazada fallecida

El OGAT exige “justicia para Laura y su bebé, así como una investigación exhaustiva sobre las circunstancias de su muerte”.

El Observatorio de Género de Alas Tensas (OGAT) lamentó la muerte de la joven embarazada cubana Laura Castillo Zulueta y su bebé el pasado 15 de mayo, a la vez que condenó “la falta de ética del director del Hospital Materno Hijas de Galicia en La Habana, Ernesto Cordoví”, quien publicó en redes sociales imágenes e información privada de la fallecida.

Janet Zulueta Curbelo, madre de la joven, culpó en una publicación en sus redes sociales a presuntas negligencias médicas cometidas por los profesionales sanitarios del hospital “Hijas de Galicia” del fallecimiento de su hija, quien tenía 29 años de edad y 25 semanas de embarazo.

De acuerdo con la madre de la fallecida, la joven recibió un trato “negligente”, fue “maltratada y mal atendida” y no le realizaron ningún tipo de examen, por lo cual decidió llevarla al Hospital Nacional, donde los doctores “hicieron todo lo posible para salvarle la vida, pero ya era tarde”.

Lo que nadie esperó fue que Ernesto Cordoví, director del hospital “Hijas de Galicia”, conocido por ser youtuber además de médico, con el objetivo de defender al centro sanitario explicó en sus redes sociales el tratamiento aplicado a la joven y publicó una imagen de ella en plena operación con el abdomen abierto y los intestinos expuestos.

Esta clara violación de la privacidad de la paciente fallecida causó indignación entre los familiares de la joven y organizaciones feministas como el OGAT, que denunció que “este abuso de poder y la violación de la privacidad son inaceptables”.

Violación a la privacidad

La plataforma feminista cubana también denunció la publicación de “imágenes explícitas de la intervención quirúrgica” a la que fue sometida la joven, “así como otros datos confidenciales de la fallecida, culpando cruelmente a la madre por la tragedia, y evidenciando una total falta de ética y de empatía”.

Por ese motivo, el OGAT exigió “justicia para Laura y su bebé, así como una investigación exhaustiva sobre las circunstancias de su muerte”.

En un texto publicado en El Toque, el jurista cubano Eloy Viera Cañive afirmó que el compromiso de confidencialidad que asumen los médicos “no solo abarca los aspectos clínicos, sino también lo relacionado con la dignidad y el respeto hacia el paciente”.

En ese sentido, consideró que “pocos hechos son más contrarios a la dignidad y a la imagen de una persona que mostrarla como un «animal de feria» al exponer su cuerpo enfermo. Sobre todo cuando se hace sin el consentimiento de la persona afectada o de sus familiares y sin perseguir un fin educativo, sino uno vindicativo”.

Para garantizar la confidencialidad de los tratamientos médicos, numerosos países han establecido leyes y decretos al respecto. Uno de los más universales es la Declaración de Ginebra, adoptada por la Asociación Médica Mundial, la cual reconoce “que es obligación guardar y respetar los secretos que se le hayan confiado a los médicos, incluso después del fallecimiento de sus pacientes”.

De acuerdo con el artículo 393.1 del Código Penal cubano “es delito divulgar o transmitir fotos o videos de carácter personal o familiar sin el consentimiento de la persona afectada si el propósito es afectar su intimidad personal y familiar”, por lo que Cordoví, quien pidió “cárcel” para la madre de la joven fallecida, podría cumplir entre uno y tres años de prisión.

¿Feminicidio Ginecobstétrico?

Tanto el OGAT como la plataforma feminista Yo Sí Te Creo en Cuba han reclamado “una investigación exhaustiva” sobre las causas de la muerte de la joven de 29 años de edad, pues “puede implicar hasta delitos de diferentes magnitudes, incluido el feminicidio ginecobstétrico”.

El pasado año 2023 el OGAT y YSTCC incluyeron la categoría de feminicidio ginecobstétrico en su informe anual de violencia de género tras verificar un caso de esta tipología en septiembre, cuando falleció una joven de 27 años identificada como Anuvis de la Caridad Delgado Acosta por complicaciones derivadas del parto y la violencia obstétrica que sufrió en el hospital.

Ambos observatorios, el OGAT y YSTCC, definen un feminicidio ginecobstétrico como “el asesinato de una mujer que se genera en el ámbito de los servicios de salud y que consiste en cualquier acción u omisión, por parte del personal de salud, durante el embarazo, parto y posparto. Se incluyen muertes por complicaciones derivadas de abortos y partos clandestinos/inseguros”.

Las integrantes de la plataforma feminista OGAT, explicaron en la presentación del informe de 2023 que fueron los reportes de casos reales en Cuba de muertes derivadas de violencia obstétrica la razón que las llevó al debate necesario sobre cómo registrar estas situaciones en el contexto cubano.