Arte │ Frida Kahlo: los aspectos duros de la experiencia femenina

Frida Kalho no es sólo una de las pintoras más importantes de América, sino también una figura universal de la cultura y el feminismo.

| Multimedia | 12/09/2025
Frida Kahlo: "Las dos Fridas" (1939), detalle.
Frida Kahlo: "Las dos Fridas" (1939), detalle.

La pintura de Frida Kahlo es testimonio de una vida marcada por el dolor físico y emocional, una especie de bitácora visual donde cada imagen revela una herida, una alegría o las huellas de una identidad fragmentada. A través de sus autorretratos, Kahlo se empeñó en ver más allá de lo aparente las profundidades de su yo interior, y en esa búsqueda agónica sacó a la luz una manera distinta de asumir su condición de mujer, su amor, su identidad y su sufrimiento.

A diferencia de muchos contemporáneos suyos, no buscó idealizar la vida o acomodarla a los esquemas de una ideología. Su arte, además de intenso y personal, es directo, desafiante y perturbador. El empleo de elementos surrealistas no responde en ella a un deseo de evadirse, ni es resultado de un simple juego con las posibilidades expresivas novedosas de su tiempo, sino que fue una forma de confrontar su realidad a través de un lenguaje simbólico que se abre a complejas interpretaciones, tan complejas acaso como la propia experiencia de ser lo que Frida Kalho fue, más allá de cualquier clasificación o etiqueta.

Multidimensional e irreductible

La relevancia de su obra radica, por un lado, en su acierto para fundir lo personal y lo político sin rebajar su arte a la condición de instrumento al servicio de partidos o intereses de poder. Por otro lado, fue pionera en la exploración de la identidad y el género desde una perspectiva que, sin apegarse a estrechas normas morales ni hacer alardes de ruptura, supo desnudar y acoger lo contradictorio y lo ambiguo como aspectos esenciales de su naturaleza.

La vulnerabilidad que Kalho expuso en su pintura, los aspectos duros de la experiencia femenina que otros artistas silenciaban ―el aborto, la infertilidad, la bisexualidad―, pero también el origen y la herencia cultural plurales de México, han encontrado eco y han sido inspiración para varias generaciones de espectadores y artistas, convirtiéndola en un símbolo multidimensional e irreductible: de fragilidad y resiliencia, autenticidad y misterio, de valor y temor, de belleza e imperfección.

La fuerza de sus imágenes, la difícil armonía que logró entre las tremendas paradojas de su vida y de su tiempo, le han merecido un lugar único, no sólo entre las pintoras más importantes de América, sino como figura universal de la cultura y el feminismo.

  • Frida Kahlo: "El venadito" (1943).
  • Frida Kahlo: "Los frutos de la tierra" (1938).
  • Frida Kahlo: "Mi nana y yo" (1937).
  • Frida Kahlo: "Autorretrato en la frontera de México y los Estados Unidos" (1932).
  • Frida Kahlo: "Sin esperanza" (1945).
  • Frida Kalho: "Raíces" (1953), detalle.
  • Frida Kahlo: "El abrazo de amor del universo" (1949), detalle.
  • Frida Kalho: "Henry Ford Hospital" (1932).
  • Frida Kalho: "Sol y vida" (1947).
  • Frida Kahlo: "Autorretrato con el retrato del doctor Farill" (1951).
  • Frida Khalo. Nacimiento

Frida Kalho: "Autorretrato dedicado al Dr. Eloesser" (1940), detalle.

Más sobre Frida Kalho en Alas Tensas

▶ Vuela con nosotras

Nuestro proyecto, incluyendo el Observatorio de Género de Alas Tensas (OGAT), y contenidos como este, son el resultado del esfuerzo de muchas personas. Trabajamos de manera independiente en la búsqueda de la verdad, por la igualdad y la justicia social, por la denuncia y la prevención contra toda forma de violencia de género y otras opresiones. Todos nuestros contenidos son de acceso libre y gratuito en Internet. Necesitamos apoyo para poder continuar. Ayúdanos a mantener el vuelo, colabora con una pequeña donación haciendo clic aquí.

(Para cualquier propuesta, sugerencia u otro tipo de colaboración, escríbenos a: contacto@alastensas.com)