José Daniel Ferrer llega a Estados Unidos desterrado por el régimen cubano
“Las condiciones son muy favorables para que nos alineemos los que estamos en contra del régimen”, asegura José Daniel Ferrer tras su arribo a Miami.

Tras largos años de injusto encarcelamiento por oponerse al gobierno cubano, en los que sufrió castigos y privaciones de todo tipo, José Daniel Ferrer llegó el lunes 13 de octubre a territorio estadounidense. “El liderazgo de Ferrer y su incansable defensa del pueblo cubano fueron una amenaza para el régimen, que lo encarceló y torturó repetidamente”, dijo el secretario de Estado norteamericano, Marco Rubio desde su cuenta en X.
Ferrer fue trasladado desde la prisión de Mar Verde hasta el aeropuerto internacional de Santiago de Cuba, donde abordó el avión que lo condujo junto a su familia a Miami. Al llegar, fue recibido por los congresistas cubanoamericanos Mario Díaz-Balart y Carlos Giménez, y la alcaldesa Daniella Levine Cava. Y el exilio cubano lo condecoró con la medalla Truman-Reagan a la libertad, en reconocimiento a su lucha incansable por un cambio democrático en Cuba.
“Es imposible que nosotros solos podamos democratizar Cuba; necesitamos la solidaridad y el apoyo del mundo libre, de los Estados Unidos”, señaló Ferrer y reafirmó su voluntad de regresar a la isla lo más pronto posible para continuar su lucha: “los próceres de nuestra independencia tuvieron que salir y después regresaron, y esa es mi intención: regresar a ponerle fin a la tiranía”.
El exilio de José Daniel Ferrer

En una escueta declaración, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba explicó por su parte que “la salida, con destino a Estados Unidos, se produce tras una solicitud formal del gobierno de ese país y la aceptación expresa de Ferrer García, en el marco de las formalidades de aplicación y cumplimiento de la ley que existen entre ambos países”. La nota del Minrex asegura además que el Estado cubano mantiene “su compromiso inquebrantable con la aplicación de la ley; la protección de los derechos de todas las personas; la defensa de nuestra soberanía frente a campañas de descrédito y la preservación de la paz y el orden constitucional”.
En contraste con esa declaración, Díaz-Balart afirmó que “el régimen hasta el último minuto estuvo tratando de crear problemas”, y que no habría concesiones a cambio de la liberación de Ferrer.
Desde que el pasado 3 de octubre sus familiares publicaran una carta donde el opositor cubano informaba de su decisión de exiliarse, las expectativas sobre si el régimen le permitiría salir o no mantuvieron inquietos a miles de cubanos dentro y fuera de la isla. En esas circunstancias, la administración estadounidense envió a dos funcionarios del Departamento de Estado a Santiago de Cuba con la tarea de acompañar a Ferrer en su viaje y con la indicación de que no regresaran a Estados Unidos hasta sacarlo de prisión.
Desde la sede de la Fundación Nacional Cubano Americana (FNCA) en Miami, donde fue recibido por la opositora Rosa María Payá, Ferrer dijo sentirse contento de estar con su familia en tierra de libertad, pero triste sobre todo por los que todavía quedan en las cárceles de Cuba.
“Las condiciones son muy favorables para que nos alineemos los que estamos en contra del régimen”, afirmó: “Tenemos que buscar más unidad”, y felicitó a María Corina Machado por su reciente reconocimiento con el Premio Nobel de la Paz.
▶ Vuela con nosotras
Nuestro proyecto, incluyendo el Observatorio de Género de Alas Tensas (OGAT), y contenidos como este, son el resultado del esfuerzo de muchas personas. Trabajamos de manera independiente en la búsqueda de la verdad, por la igualdad y la justicia social, por la denuncia y la prevención contra toda forma de violencia de género y otras opresiones. Todos nuestros contenidos son de acceso libre y gratuito en Internet. Necesitamos apoyo para poder continuar. Ayúdanos a mantener el vuelo, colabora con una pequeña donación haciendo clic aquí.
(Para cualquier propuesta, sugerencia u otro tipo de colaboración, escríbenos a: contacto@alastensas.com)
Responder