
La modificación del Código Penal italiano, aprobada por unanimidad, reconoce el feminicidio como un delito específico.

Las cifras oficiales reportadas en 2024 y los feminicidios verificados por OGAT y YSTCC confirman una violencia feminicida alta y persistente en Cuba.

OGAT insiste en que el Estado cubano tiene la obligación de adoptar medidas estructurales frente a la violencia hacia las mujeres y las niñas.

En Cuba y en toda América Latina, las brechas legales y la impunidad amplifican el daño.

El feminicidio es el asesinato de una mujer por razones de género, considerado la máxima expresión de la violencia contra las mujeres.

Con los crímenes de Liudmila Álvarez y Noralis Estenoz se elevan a 35 los feminicidios en Cuba en 2025.

Dayli Acosta (en La Habana) y Yamila Zayas (en Matanzas) son las más recientes víctimas de feminicidio documentadas por OGAT y YSTCC.

Marchas multitudinarias e intentos de ocultar la gravedad de la violencia machista acompañan la investigación del triple feminicidio en Argentina.

“El caso de Lara, Brenda y Morena ha despertado polémicas por el modo en que se culpó a las víctimas, intentando negar la validez del término feminicidio.”

OGAT y YSTCC reclaman refugios, tipificación del feminicidio y libertad de acción para organizaciones de la sociedad civil.