"Cleotilde o el gesto de la literatura", pertenece a "El constante aleteo", primera novela de Yudarkis Veloz. Este relato marca el ritmo atmosférico, erótico que caracteriza su escritura.
"Desde los blancos manicomios", una novela de Margarita Mateo que se atreve a diseñar una advertencia, un signo de complicidad y reafirmación: el dolor es necesario e inevitable, pero sólo llega a purificar cuando se lo acepta con entereza.
En la noveleta "Ronquenval", la escritora exiliada rusa Nina Berberova construye un mundo diverso, donde la nostalgia, la ruina y el futuro se asocian y fortalecen mutuamente.
"¿Y cómo me explico el rápido latir de mi propio corazón mientras observo a la pareja más bella y extraordinaria que jamás he visto?
"And what to make of the quick beating in my own heart as I behold the most extraordinarily beautiful people I’ve ever encountered?"
“...esa materia poética que gime y ondula, que se deja recorrer por un 'pathos' coloquial, está la más permanente fascinación de esta poesía”.
"Lo que fue ciudad" es un libro sobrio y distante porque ya se sabe, lo elegante tiene una buena carga de lo inalcanzable.
Las regalías que se obtengan de la venta del libro serán destinadas a la causa de los presos políticos cubanos.