La FMC ha avalado el actuar del Estado cubano, pasando por alto las constantes violaciones a los derechos de la mujer que bajo su amparo se cometen.
A pesar de la retórica de igualdad de género por parte del gobierno cubano, estos casos demuestran una flagrante violación de los derechos de las mujeres y la falta de protección efectiva contra la violencia de género en el país.