Mujeres de Placetas amenazadas con largas penas de cárcel tras el 11J

Las hermanas Lisdany y Lisdiany Rodríguez Isaac se encuentran encarceladas desde el 15 de julio de 2021, tras haber participado del estallido social del #11J en Placetas, Villa Clara.

A ambas se les acusa de los supuestos delitos de desacato, vandalismo, propagación de epidemias y desorden público. Su madre, Barbarita Isaac Rojo ha denunciado a los medios que no ha visto a sus hijas desde de que el jefe de la Policía Nacional Revolucionaria de Placetas, Héctor de la Fe Freire, las arrestó.

Las dos jóvenes se encuentran bajo una medida cautelar de prisión preventiva en Guamajal, en la ciudad de Santa Clara, donde se hallan a la espera de la fecha del juicio.

En declaraciones para Cubanet la madre ha denunciado la falta de medicamentos en la que se encuentran Lisdany y Lisdiany:

“Mis hijas me han llamado dos veces de la cárcel para pedir antibióticos porque tienen unas picadas muy infectadas y allí no les dan nada. Y yo afuera tampoco tengo. Una madre no puede dormir con eso”.

Lisdiani además es madre de una niña de tres años que ya presenta “trastornos del sueño” por la lejanía que se le impone de su madre, según ha reportado ADN Cuba.

En la misma nota, ADN Cuba también ha confirmado que el Tribunal Supremo de Cuba a nombre del régimen cubano, ha rechazado la petición de libertad para las hermanas de 22 años.

Por otro lado ha informado la periodista Claudia Padrón Cueto que la Fiscalía Municipal de Placetas, Villa Clara, ha pedido sanciones de 10 años de privación de libertad para Lisdany y Lisdiany. Estas penas son consideradas unas de las las mayores entre los casos que han salido a la luz relacionados con el 11 de julio.

Otras mujeres activistas de Placetas vinculadas a la Asociación Yorubas Libres de Cuba y a la Academia “Julio Machado” se encuentran también en prisión preventiva. Algunas de ellas son Arianna López Roque, Donaida Pérez Paseiro y Nidia Bienes Paseiro.

En el caso de Arianna se ha visto que en reiteradas ocasiones el gobierno cubano ha intentado deslegitimar su activismo y amedrentarla. Ha sido víctima de difamaciones con mensajes homófobos, de allanamientos a su vivienda, y detenciones violentas.

Recuérdese el vandalismo a su vivienda que sufrió Arianna en 2018 debido a una protesta que estaba realizando ante la prohibición impuesta por la Seguridad del Estado de impedirle durante un año la visita en prisión a su esposo, el opositor Mitzael Díaz Paseiro.

Y en abril de 2021 la propia Arianna denunciaba en Radio Martí que había sido arrestada dos veces en menos de 24 horas, el 16 y 17 de abril, solo porque se estaba realizando el Congreso del Partido Comunista. Durante esas jornadas Arianna habría tenido un operativo policial rodeando su domicilio.

Esta activista tiene dos hijos, uno de 8 y otro de 12 años, que en estos momentos se encuentran al cuidado de una abuela porque el padre de los niños, Mitzael Díaz, también está en prisión por haber participado en el #11J.

Según ha reportado el Directorio Democrático Cubano Arianna pudo realizar su primera llamada telefónica desde su arresto, el 16 de agosto de 2021, y en esa comunicación pudo comentar el tratamiento que había recibido hasta ese momento. Según su testimonio fue golpeada el día de la detención y estuvo realizando una huelga de hambre durante los 10 días que había permanecido en las prisiones de la Seguridad del Estado.

La Fiscalía Provincial de Villa Clara ha pedido para Arianna, Donaida y Nidia ocho años de privación de libertad.

Las mujeres cubanas además de la preocupación diaria de sostener a la familia, luego del 11de julio se han visto enfrentadas a otra realidad, la de interceder por los hijos e hijas detenidos; y la de salvaguardar a nietos y nietas. Todo esto en medio de una situación sanitaria y económica crítica.