En 1916 el Papa Benedicto XV proclamó oficialmente a la Virgen de la Caridad del Cobre como Patrona de Cuba.
Como parte de la celebración, se distribuyeron alimentos a los más vulnerables en un gesto que convirtió la fe en acción solidaria.
Poetas y artistas cubanos rinden tributo a la Virgen de la Caridad del Cobre.