Poesía iraní │ Dos poemas de Forugh Farrojzad

Desde que a los veinte años publicó su primer poema, la obra de Forugh Farrojzad estuvo ligada a la lucha por la libertad de la mujer iraní.

| Escrituras | 06/10/2024
Shirin Neshat: "Ojos que se ofrecen" (1993).
Shirin Neshat: "Ojos que se ofrecen" (1993).

Cautiva

Te deseo y sé que nunca
podré abrazarte, llegar a ti.
Tú eres el cielo aquel, abierto y diáfano.
Yo, un pájaro en su jaula.

Por detrás de los fríos y oscuros barrotes,
mis ojos buscan tus ojos con anhelo.
Imagino que una mano se acerca y, de repente,
voy hacia ti, volando.

Fantaseo con que se despistan
un instante
y abandono volando esta prisión de silencio
y me río de quien me vigilaba;
con volver a vivir junto a ti fantaseo.

Fantaseo y fantaseo y sé que nunca
tendré valor para dejar esta cárcel,
que aunque mi carcelero lo permita
no tengo fuerzas para alzar el vuelo.

Detrás de los barrotes, cada día,
un niño me contempla y sonríe.
Yo le respondo alegre, entusiasmada,
y él me besa los labios.

Ay, cielos, qué pasaría si por fin
me decido a volar, a salir de esta jaula?
¿Qué les diría
a los ojos llorosos de ese niño?
Déjame, por favor, soy un pájaro preso.

Soy esa vela que mientras se consume
alumbra esta casa sombría y en ruinas.
Pero si al fin enmudeciera
destrozaría mi nido sin remedio.

________________

Sobre la tierra

Nunca he deseado ser
una estrella en el espejismo del firmamento
o, como un alma distinguida,
ser la silenciosa acompañante de los ángeles.
Nunca he estado separada de la tierra,
no he conocido a los astros.

Estoy de pie sobre la tierra,
con mi cuerpo,
que, como el tallo de una planta,
absorbe viento, luz del sol y agua
para vivir.

Fértil por deseo,
fértil por dolor,
sobre la tierra estoy,
para que los astros me adoren,
para que las brisas me acaricien.

Miro a través de mi ventana.
No soy más que la resonancia de una canción.
No soy eterna.
No busco más que el eco de un canto
en el dolor de un placer
que es más puro que el sencillo silencio de la tristeza.
No busco un nido
en el cuerpo que es rocío
sobre la flor de mi cuerpo.

En las paredes de la cabaña que es mi vida,
los paseantes han grabado recuerdos
con la negra letra del amor:
un corazón herido,
una vela desparramada,
unos discretos puntos pálidos
sobre las confusas letras de la locura.

Cada labio que se unía a mis labios
engendraba en mi noche una estrella
que se sentaba sobre el río de los recuerdos.
Entonces, ¿para qué desear ser estrella?
Esa es mi agradable canción.
Nunca quise más que esto.

Shirin Neshat, obra sin título de la serie "Las mujeres de Alá"(1996).
Shirin Neshat, obra sin título de la serie "Las mujeres de Alá" (1996).

________________

Desde que a los veinte años publicó su primer poema, “Pecado”, en una revista literaria, la obra de Forugh Farrojzad estuvo ligada a la lucha por la libertad de la mujer y el reconocimiento de su derecho a expresar sus sentimientos, cuestiones estas que la tradición persa les negaba. Aquel poema conmocionó a la sociedad iraní e hizo que su esposo la repudiara y le quitara la custodia de su hijo. Pero no impidió que Forugh continuara dando voz en sus versos al malestar contra las normas que mantenían a las mujeres sometidas a la voluntad del hombre. Ese año publicó su primer libro, Cautiva, al que pronto siguieron El muro y Rebelión; obras que la confirman no solo como símbolo del feminismo en Irán, sino como una autora excepcional en el panorama de las letras de su país.

Tras la muerte de Forugh Farrojzad a los 32 años, en un accidente automovilístico, la prestigiosa revista Sokhan, de Teherán, le dedicó el siguiente homenaje: “Forugh es probablemente la primera escritora en la literatura persa capaz de expresar las emociones y sentimientos románticos del género femenino, a través de versos francos y elegantes. Ha inaugurado un nuevo capítulo en la historia de la poesía persa”.

Ilustra estos poemas de Forugh Farrojzad la fotografía de Shirin Neshat, una de las artistas visuales contemporáneas más sobresalientes de Irán. Con su obra, que incluye también la instalación y el cine, Neshat reta las normas que pretenden hacer de la mujer islámica un ser sumiso: “La mujer puede tomar un arma y ser peligrosa ―ha dicho a propósito de Silencio rebelde (1994)―, pero al mismo tiempo sus ojos son vulnerables y pueden estar llenos de miedo e incertidumbre. Eso dice algo sobre nosotras, que con frecuencia somos manipuladas y controladas”.

Shirin Neshat estudió arte en universidades de California y, tras un largo período de búsquedas formales regresó a Irán en 1990, donde sus ideales de democracia y libertad de expresión tropezaron con los dogmas del ayatolá Jomeini y la Revolución Islámica. Ese choque cultural inspiró sus series fotográficas “Sin velo” (1993) y “Mujeres de Alá” (1993-1997), donde se exhibe una preocupación por los contrastes entre feminidad y violencia, e identidad y libertad, temas que han definido su carrera artística posterior. En piezas como Ojos que se ofrecen (1993), Shirin Neshat emplea versos de Forugh Farrojzad, donde la poeta habla sin pudor sobre el deseo sexual de las mujeres.

▶ Vuela con nosotras

Nuestro proyecto, incluyendo el Observatorio de Género de Alas Tensas (OGAT), y contenidos como este, son el resultado del esfuerzo de muchas personas. Trabajamos de manera independiente en la búsqueda de la verdad, por la igualdad y la justicia social, por la denuncia y la prevención contra toda forma de violencia de género y otras opresiones. Todos nuestros contenidos son de acceso libre y gratuito en Internet. Necesitamos apoyo para poder continuar. Ayúdanos a mantener el vuelo, colabora con una pequeña donación haciendo clic aquí.

(Para cualquier propuesta, sugerencia u otro tipo de colaboración, escríbenos a: contacto@alastensas.com)