
Considerada entre los escritores británicos más importantes del siglo XX, Angela Carter aborda en sus obras temas como la explotación sexual y la liberación femenina.

Katherine Anne Porter construye en este cuento una impactante semblanza de tres mujeres distintas conectadas por la necesidad, la sordidez y la magia.

Con su literatura y su infatigable activismo, Emma Lazarus contribuyó a definir la identidad y los valores de la sociedad estadounidense en el siglo XX.

“Un cuento es bueno cuando podemos seguir viendo más y más cosas en él, y cuando, pese a todo, sigue escapándose de uno.”

Inspirada en las leyendas y costumbres de su pueblo, Selma Lagerlöf construyó una obra deslumbrante por su originalidad y su idealismo.

La escritura de Georgina Herrera, clara y directa, lleva en sí una fuerza poco habitual: aquella que le dan su origen y las tradiciones culturales de sus antepasados.

Ajena a poses y estruendos, casi con discreción, Aimée González Bolaños logró esa difícil síntesis entre sensibilidad e inteligencia que define a los grandes poetas.

Este breve cuento nos permite advertir la notable habilidad de Dora Alonso para representar el drama de la vida desde perspectivas siempre inusitadas.

Con su personal sensibilidad poética, Zurelys López Amaya recrea en este cuento uno de los dramas humanos más terribles de la sociedad mexicana actual.

En este cuento, Lorrie Moore refleja, con esa mezcla de sarcasmo e inteligencia que la definen, una parte de sus experiencias como autora y educadora.