Poesía italiana ⎸ Te doy a mí misma

“Y tú acoge mi maravilla / de criatura, / mi temblor de tallo / vivo en el círculo de los horizontes”

Te doy a mí misma,
mis noches insomnes,
los largos sorbos
de cielo y estrellas ―bebidos
sobre las montañas,
la brisa de los mares que ha viajado
hacia las albas remotas.

Te doy a mí misma,
el sol virgen de mis mañanas,
sus fabulosas orillas,
entre las columnas supervivientes,
y los olivos y las espigas.

Te doy a mí misma,
los mediodías
sobre las pestañas de las cascadas,
los ocasos
a los pies de las estatuas, sobre las colinas,
en medio de los troncos de cipreses animados
por los nidos.

Y tú acoge mi maravilla
de criatura,
mi temblor de tallo
vivo en el círculo
de los horizontes,
plegado al viento
límpido ―de la belleza:
y tú deja que yo mire estos ojos
que Dios te ha dado,
así, llenos de cielo,
profundos como siglos de luz,
hundidos más allá
de las cumbres.

Antonia Pozzi fue una poetisa italiana nacida en 1912 y fallecida en 1938. A lo largo de su corta vida, escribió una notable colección de más de 300 poemas en los que abordó temas como el amor, la naturaleza, la soledad y la búsqueda espiritual. Su obra poética refleja una profunda sensibilidad y una conexión íntima con la naturaleza. A pesar de su temprana muerte, Antonia Pozzi dejó un legado significativo en la literatura italiana y es recordada como una de las voces poéticas más importantes del siglo XX. Murió a los 26 años, se quitó la vida. El 2 de diciembre de 1938, tras un intento de suicidio con barbitúricos, fue encontrada inconsciente en una zanja frente a la abadía de Chiaravalle, un suburbio de Milán; murió al día siguiente. La familia se negó a admitir que fue un suicidio y atribuyó su muerte a la neumonía. La obra pictórica que acompaña este poema es un fragmento de “El abrazo”, de Gustav Klimt (1862 – 1918)