Feminicidio | ¡Las vidas de las cubanas importan!

Cuatro feminicidios en el mes de abril y uno ya reportado en el mes de mayo, suman un total de 16 casos sólo en 2021, verificados por el observatorio de violencia de género de Alas Tensas.

Las víctimas se nombraban Martha Morejón Noda, Yusimí Díaz, Yelena Rivero Rivero, Nurian Sánchez y una joven conocida como la Jimagua.

Los hechos ocurrieron en distintas regiones de país, a saber Pinar del Río, La Habana, Santiago de Cuba, Holguín y Artemisa, respectivamente.

Todos los feminicidios fueron perpetrados por las ex parejas de las víctimas y destaca el uso de arma blanca en la mayoría de las agresiones.

Nuestro observatorio pudo recopilar información, en mayor o menor medida, sobre estos hechos y sobre las respectivas identidades de estas mujeres. Nos gustaría compartir algunos de los datos obtenidos.

En el caso de Martha Morejón Noda, hemos confirmado que trabajaba en el hospital Abel Santamaría, que tenía a su cuidado un hijo, y que había denunciado a su expareja en años anteriores por eventos violentos.

Por otro lado, a la joven conocida como la Jimagua y residente del asentamiento rural de La Ceiba, en San Antonio de los Baños, le sobreviven cuatro hijos. Hemos corroborado además que al menos uno de ellos presenció la agresión mortal contra su madre.

Nurian Sánchez tenía 38 años y era residente en Antilla, Holguín. Era enfermera del hospital René Ramos Latour y tenía dos hijos. Su expareja se suicidó después de cometer el crimen.

Yelena Rivero Rivero era una joven profesora de sexto grado en el seminternado "Manuel Ascunce Domenech", en las proximidades de la Universidad de Oriente, en Santiago de Cuba.

Según información publicada por el periodista Erasmo Roldán Hernández, su expareja la agredió en plena vía pública. Y en el momento de los hechos la acompañada una colega, Yuneidy Granado, quien tuvo que salir corriendo para preservar su vida y la de su hija.

En febrero de 2021 alertábamos en una declaración conjunta con otros dos observatorios independientes, a las autoridades cubanas sobre el aumento de los feminicidios debido al régimen de confinamiento que impone el Covid-19.

Nuestra preocupación no solo se sustentaba en la cantidad de casos que nuestras plataformas iban subregistrando, sino también teniendo en cuenta los llamados de atención que ONU Mujeres desde el inicio de la pandemia había realizado:

“Desde que se desató el brote de COVID-19, los nuevos datos e informes que presentan quienes están en primera línea revelan que se ha intensificado todo tipo de violencia contra las mujeres y las niñas, sobre todo, la violencia en el hogar.

Es la pandemia en la sombra que crece en medio de la crisis de la COVID-19 y necesitamos un esfuerzo colectivo general para detenerla. Dado que los casos de COVID-19 siguen sobrecargando los servicios de salud, los servicios esenciales –como los refugios y las líneas de atención en los que se atiende a quienes padecen violencia en el hogar– han alcanzado el límite de su capacidad. Es preciso redoblar los esfuerzos para que enfrentar la violencia contra las mujeres pase a ser una prioridad en las medidas de recuperación y respuesta a la COVID-19”.

A la fecha en Cuba no se han hecho público cifras oficiales de feminicidios pese a que en marzo de este año la Federación de Mujeres Cubanas anunciaba a la prensa internacional, el estudio de la metodología de un observatorio oficial.

De este modo, volvemos a exigir al gobierno cubano que se declare de inmediato el estado de emergencia por violencia machista en el país; que se tipifique el feminicidio dentro del Código Penal; que se hagan públicas cifras oficiales de asesinatos por razones de género; y que de una vez se desarrolle e implemente una Ley Integral contra la Violencia de Género en Cuba.