Tras más de 144 feminicidios durante su mandato, Díaz-Canel condena por primera vez la violencia de género

En lo que va de 2023 en Cuba han sido verificados al menos 26 feminicidios, lo que indica un incremento de la violencia machista cada año, según subregistros de observatorios.

Tras más de 144 feminicidios durante lo que lleva de mandato, el gobernante cubano Miguel Díaz-Canel condenó de forma directa por primera vez a la grave situación de la violencia machista en Cuba este sábado 14 de abril, aunque sigue sin mencionar la palabra “feminicidio”.

“Esta tiene que ser una sociedad con cero tolerancia para la violencia y en particular para la violencia contra la mujer”, dijo el también primer secretario del Partido Comunista de Cuba (PCC), en un encuentro convocado por la Federación de Mujeres Cubanas (FMC) con 480 mujeres de las provincias de La Habana, Cienfuegos, Villa Clara, Sancti Spíritus y Ciego de Ávila, según informó la agencia EFE.

Más tarde, en su cuenta de Twitter, reiteró el mensaje: “Lo dije allí y lo escribo aquí: Una sola mujer violentada, no sólo es un golpe a la tradición feminista de la Revolución, es un acto inaceptable para nuestra sociedad socialista. Tolerancia cero”.

En un video divulgado sobre su intervención en la reunión, Díaz-Canel afirmó que se realizará un debate nacional, así como un grupo de acciones para proteger a las mujeres que puedan ser víctimas de violencia de género, aunque no dio detalles al respecto.

No obstante, la activista feminista cubana Yanelys Núñez, coordinadora del Observatorio de Género de Alas Tensas (OGAT), dijo que realmente no cree “que las declaraciones de Díaz-Canel y los encuentros que está teniendo con las mujeres provoquen cambios significativos, porque mientras hace esas afirmaciones se sigue criminalizando cualquier tipo de activismo, porque no se han tomado medidas contundentes, y desde el 2021, cuando él mismo aprobó el Plan de Adelanto para la Mujer y la Estrategia integral de prevención y atención a la violencia de género en el escenario familiar, no se han visto resultados de esas medidas”.

Además, Núñez consideró que “es necesario que se vean medidas urgentes en el propio seno del aparato jurídico, en la prensa oficial, que se puedan monitorear los feminicidios de manera transparente, porque una campaña de sensibilización se trata de tomar medidas, exponer los resultados satisfactorios o no, y, por supuesto, trabajar con la sociedad civil codo a codo”.

Por último, la activista cubana agregó que “si desde el propio poder hay una desvinculación con la sociedad civil y la ciudadanía, a la que no se escucha y se criminaliza por cualquier crítica, no creo que esto haga ninguna diferencia. Pero digamos que esta respuesta de Canel es debido al trabajo de los observatorios independientes y de las feministas que recogen los datos de feminicidios y son parte de la campaña de sensibilización que se necesita”.

Por su parte la presidenta de la Red Femenina de Cuba, Elena Larrinaga, consideró que si bien reconocer la problemática “es un paso, ahora queda legislar una Ley Orgánica de Medidas de Protección Integral que abarque aspectos preventivos, educativos, sociales, asistenciales y de atención posterior a las víctimas”.

Las palabras del gobernante cubano, que ha hecho silencio al respecto durante los casi cinco años que lleva en el poder, tienen lugar en un momento sumamente delicado respecto a la violencia machista en la Isla, que ha cobrado 26 vidas en lo que va de 2023.

También contrastan con el proceder del Gobierno cubano, que hizo oídos sordos el pasado mes de febrero ante la petición de una decena de organizaciones feministas cubanas para que se declarara un Estado de Emergencia por violencia de género, luego de que fueran reportados al menos tres feminicidios en tan solo una semana.

En en el mes en curso, y también en tan solo una semana, fueron verificados al menos cuatro feminicidios en Cuba, de los cuales el más reciente tuvo lugar el pasado 11 de abril, cuando una cubana llamada Ana Ivis Llanes y fue asesinada por su pareja, en su hogar, ubicado en el barrio El Rastro, en el municipio cabecera de Artemisa.

Tan solo dos días antes OGAT confirmó el feminicidio cometido contra Aliuska Jardines, una mujer que fue apuñalada por su pareja en el municipio capitalino de la Habana Vieja. 

Desde el comienzo de 2019, cuando Díaz-Canel ya llevaba ocho meses al frente del Gobierno cubano, OGAT ha reportado un total de 144 feminicidios en Cuba, pues ese año contabilizó 14 casos, en 2020, con la creación de una red nacional de observadoras, pudo verificar 32, en los años subsiguientes, 2021 y 2022, verificó 36 feminicidios en cada uno, y en lo que va de 2023 han sido confirmados 26.

No obstante, en Cuba siguen sin haber registros oficiales de feminicidios, ni tampoco hay una línea especializada para temas de violencia de género.

En tanto, y pese al reclamo de las feministas cubanas, el feminicidio no está tipificado dentro del Código Penal, no hay una Ley Integral contra la violencia de género y se criminaliza todo el activismo feminista independiente en ese sentido.

Además, no existe la posibilidad de reunión, manifestación y de libre expresión para las mujeres que se encuentran inmersas en esta u otras luchas sociales.