Fiscalía pide 19 años de prisión a una joven manifestante del 11J

Liliana Oropesa se manifestó en la Güinera, en el mismo barrio donde la policía asesinó a Diurbis Laurencio.

A la joven de solo 20 años, Liliana Oropesa Ferrer, se le acusa de sedición por manifestarse pacíficamente en la Güinera, La Habana, el pasado 12 de julio.

En ese mismo barrio humilde fue asesinado por la policía cubana, por la espalda con un arma de fuego, el joven negro Diurbis Laurencio para el que aún no ha habido justicia.

Sin embargo, todo el peso de una ley injusta se le está aplicando a jóvenes como Liliana, a quien en su caso, la Fiscalía pide 19 años de privación de libertad. Esta denuncia en Twitter la hizo el periodista Rubén Cortés.

Algunos medios independientes han reportado que la evidencia que tienen en contra de Oropesa, es una fotografía donde supuestamente ella coloca una botella en el suelo.

Daniela Rojo, una joven madre que fue arrestada también en julio y que coincidió con Liliana en la prisión describe a Oropesa de la siguiente manera: “Es una muchachita morenita flaquita, de 20 añitos. Extraña muchísimo a su familia. Llora mucho y cada carta para ella es la visita de un ángel”.

Una de las últimas actualizaciones de Cubalex, organización defensora de los derechos humanos, indica que 897 personas continúan detenidas. De ellas 352 han sido excarceladas y 400 siguen en prisión; 12 de de los detenidos se encuentran en el rango de 18 años o menos edad.

Tanto los arrestos como las condenas a las que piensan someter a tantas personas, muchas de ellas ya sancionadas en juicios sumarios, son completamente arbitrarios y discriminatorios.

El gobierno cubano solo busca con estas acciones imponer más terror en la sociedad para inhibir la participación libre en la política de los ciudadanos.