Teatro | La Diosa de Cuba se presenta en Teatro Trail de Miami con “Monólogos de la vagina”

“Los monólogos de la vagina” (1996) de Eve Ensler fue escrita tras entrevistar a más de 200 mujeres, y aborda sin prejuicios temas de la sexualidad femenina, relaciones, amor y violencia doméstica.

Este 15 de marzo, el Teatro Trail de Miami acoge una puesta en escena que promete ser tan polémica como transgresora: Monólogos de la vagina, protagonizada por la cantante cubana Dianelis Alfonso, conocida artísticamente como La Diosa, junto a las talentosas actrices Zulema Cruz y Judith González. La obra, escrita por Eve Ensler en 1996 y basada en entrevistas a mujeres de todo el mundo, ha sido traducida a más de 45 idiomas y representada en 120 países, convirtiéndose en un icono de la lucha contra la violencia de género. Con un enfoque que desafía clichés y explora profundamente las experiencias femeninas, la obra se sumerge en una dinámica y divertida reflexión sobre creencias y comportamientos que tocan a todas las mujeres y hombres.

Dirigida y producida por el dramaturgo Manuel Mendoza, esta versión promete “cada semana traer sorpresas en el elenco”, manteniendo a la audiencia en constante expectativa. La participación de La Diosa, quien llegó a Miami en enero de 2023 gracias al parole humanitario del Gobierno de EE.UU., añade un atractivo especial a la producción.

View this post on Instagram

A post shared by Dianelys Alfonso (@diosacuba)

La artista, que ha sufrido en Cuba la destrucción de su carrera por su postura crítica, ve en esta oportunidad un renacer artístico y personal. “Estoy viviendo un momento bien lindo en mi vida, algo nuevo que estoy disfrutando”, expresó emocionada sobre su incursión en el teatro.

El Teatro Trail, un espacio dedicado a la comedia y punto de encuentro de la escena cubana y latinoamericana en el sur de EE.UU., se convierte en el escenario perfecto para este “trío sin guitarra”, como lo describió Judith González. Además de Monólogos de la vagina, el teatro anuncia futuras producciones que incluyen a conocidas figuras como Irela Bravo y Susana Pérez, consolidándose como un referente de la cultura cubana en Miami.

Los monólogos de la vagina

En Los monólogos de la vagina, cada monólogo se relaciona con la vagina, ya sea a través del sexo, el amor, la violación, la menstruación, la mutilación, la masturbación, el nacimiento, el orgasmo y la variedad de nombres para la vagina, o simplemente como un aspecto físico del cuerpo. En esta pieza, ala vagina es un instrumento de poder femenino, y la última encarnación de la individualidad.

Algunos monólogos son:

• “Yo tenía doce años, mi madre me dio una bofetada”, donde un coro describe el primer periodo menstrual de muchas jóvenes y niñas.
• “Mi vagina enojada”, en el cual, con aparente humor, una mujer habla acerca de las injusticias forjadas en contra de la vagina, como tampones, duchas vaginales, y las herramientas utilizadas por los obstetras y ginecólogos.
• “Mi vagina era mi pueblo”, un monólogo de datos de los testimonios de las mujeres bosnias víctimas de campos de violación.
• “El pequeño Coochie Snorcher que sí pudo”, donde una mujer narra los recuerdos de experiencias sexuales traumáticas en su infancia.

• “Reivindicación del coño”, una obra narrada por una mujer que pone de manifiesto que la palabra “coño” es una palabra muy bonita a pesar de sus connotaciones desconcertantes.
• “La mujer que amaba hacer vaginas felices”, en el que una trabajadora del sexo para las mujeres cuenta los detalles de su carrera y su amor por las mujeres que dan placer.
• “Debido a que a él le gustaba mirarla” describe cómo una mujer pensaba que su zona púbica era fea y se avergonzaba de pensar en ella, pero cambió de opinión debido a una experiencia sexual en la que a su compañero le gustaba pasar horas mirando su vagina.
• “Yo estuve allí, en la habitación”, un monólogo en el que Eve Ensler describe el nacimiento de su nieta.

Los monólogos de la vagina: Más que una obra, un movimiento por el cambio

Desde su debut en 1996, Los monólogos de la vagina de Eve Ensler ha evolucionado de ser una pieza teatral innovadora a convertirse en el corazón de un movimiento global sin ánimo de lucro dedicado a la lucha contra la violencia de género. Escrita tras entrevistar a más de 200 mujeres, esta obra no solo celebra la feminidad y su complejidad, sino que también aborda con valentía temas de sexo, relaciones, amor y violencia doméstica, temas que aún hoy resuenan en la sociedad global.

Ensler, con su visión y pasión, transformó conversaciones cotidianas en potentes monólogos que buscan reivindicar la vagina, liberándola de tabúes y reconociéndola como símbolo de poder femenino. La obra se estrenó en Nueva York y rápidamente trascendió fronteras, adaptándose en diversas culturas y llegando a ser representada por figuras de renombre como Oprah Winfrey y Jane Fonda, por mencionar algunas, en icónicos escenarios como el Madison Square Garden.

En países como México, España, Uruguay y Venezuela, entre otros, la obra ha visto innumerables adaptaciones, reflejando la universalidad de sus temas. Actrices de la talla de Salma Hayek y Beatriz Valdés han dado vida a los monólogos, evidenciando el impacto y la relevancia continua de esta pieza en distintos contextos culturales. A su vez, la obra ha servido de plataforma para voces políticas y culturales, demostrando que el arte puede ser un poderoso vehículo de cambio social.

Más allá de su éxito teatral, Los monólogos de la vagina ha dado origen al proyecto V-Day, un esfuerzo global que aprovecha la obra como medio para concientizar y recaudar fondos destinados a combatir la violencia contra las mujeres y niñas. Este proyecto simboliza la transición de la obra de ser un espectáculo a convertirse en un movimiento de activismo social, demostrando el poder del teatro para inspirar acción y reflexión.